El Cabildo Metropolitano de Zaragoza consagra Solemne Novena a su bendita titular y patrona, Nuestra Señora la Virgen del Pilar, desde el día 3 al 11 de Octubre de 2014 en la Catedral-Basílica zaragozana. Este año, en el marco del 1975 Aniversario de la venida de la Virgen, estará dedicada a los acontecimientos históricos que han marcado la historia de la devoción pilarista.
Estos días son un momento propicio para recordar a María como madre de la humanidad. Sin duda nos ayudará meditar sobre sus principales virtudes para apoyarnos en ella como pilar seguro y firme. María es mujer de profunda Fe, siempre cerca de Dios. Una mujer humilde, capaz de hacerse pequeña; generosa, hasta el punto de olvidarse de sí misma para darse a los demás; caritativa y servicial, atendiendo a José y a Jesús con amor; paciente con su familia y comprometida, aceptando la voluntad de Dios en su vida terrena.
Se trata de que esta novena nos ayude a esforzarnos por demostrarle nuestro cariño. Hacer lo que ella espera de nosotros y recordarla a lo largo del día.
Con estas consideraciones previas nos disponemos a recorrer este camino de la Fe, acompañados y reforzados por su maternal presencia.
El Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Manuel Ureña Pastor, Arzobispo de Zaragoza, y el Excmo. Cabildo Metropolitano invitan a todos a participar en esta solemne Novena en honor de la Santísima Virgen del Pilar.
NOVENA EN HONOR DE NUESTRA SEÑORA DEL PILAR
Primer día: Viernes, 3 de Octubre de 2014.
Tema: Bendita y alabada sea la hora. (Año 40, Venida de la Virgen a Zaragoza)
Predica: M. I. Sr. D. José María Bordetas Alonso, Canónigo de la S. I. M.
Participa: Coral “San Mateo de Gállego”, dirigida por D. Domingo Gaudó Gascón.
Tema: Bendita y alabada sea la hora. (Año 40, Venida de la Virgen a Zaragoza)
Predica: M. I. Sr. D. José María Bordetas Alonso, Canónigo de la S. I. M.
Participa: Coral “San Mateo de Gállego”, dirigida por D. Domingo Gaudó Gascón.
Lugar y hora: Altar mayor de la Catedral-Basílica, a las 20:00 horas.
Bendita y alabada sea la hora en que María Santísima vino en carne mortal a Zaragoza. Por siempre sea bendita y alabada.
Virgen María, Madre de Dios y nuestra. Tú que supiste agradar al Señor con vuestras virtudes y santa vida, conformando en todo vuestra voluntad con la divina. Alcanzadnos que de la meditación de vuestra vida, saquemos en nuestra alma un gran deseo de imitaros, haciéndonos de este modo dignos hijos de tan santa Madre. Si puede conducir a este fin la consecución de la gracia que por vuestra mediación pedimos en esta novena, estamos ciertos que el Señor, por vuestros ruegos, nos la concederá. La permanencia de vuestra querida Imagen sobre la Columna, y los innumerables beneficios que por tantos siglos habéis hecho a vuestros devotos, nos dan completa seguridad. De todos modos, Madre, nos acogemos a vuestra soberana protección, para que libres de pecado, merezcamos después de nuestra muerte disfrutar de vuestra presencia junto con el Padre Eterno. Amen
ORACIÓN FINAL
Omnipotente y eterno Dios, que por la mediación de la gloriosísima Madre de tu hijo Jesucristo y madre nuestra, la Santísima Virgen María, maravillosamente nos preparaste una celestial defensa. Concédenos por tu misericordia, que siempre seamos protegidos por el auxilio de tan insigne Señora, que con piadosa devoción veneramos bajo el distinguido título de Nuestra Señora del Pilar. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.